Como acordado con las autoridades del gobierno local, el Costa Deliziosa llegó al Puerto de Barcelona esta mañana con 1814 pasajeros y 898 tripulantes a bordo. La situación sanitaria a bordo es perfecta y no había casos de Covid 19.
El desembarque de pasajeros españoles y portugueses o residentes se completó para permitir su regreso a casa, gracias a la gran colaboración y disponibilidad de las autoridades españolas.
Excepcionalmente, aunque los puertos españoles cerraron el tráfico de pasajeros de cruceros y gracias a la colaboración con las autoridades españolas, Costa Cruceros pudo realizar esta escala.
El Costa Deliziosa dejará Barcelona esta noche para dirigirse a Genova – el destino final del crucero – donde llegará el 21 de abril por la noche. A partir del día siguiente, el desembarque de los últimos pasajeros de otras nacionalidades, incluyendo italianos, comenzará. Allí, sorteando las complejidades actuales por las restricciones de viaje impuestas globalmente por los gobiernos para contener la expansión del contagio, la compañía ha organizado repatriaciones desde Genova a diversos países.
Siguiendo el rechazo de las autoridades francesas, no fue posible realizar la escala en Francia para desembarcar a los pasajeros franceses y de otras nacionalidades cercanas. A los pasajeros franceses se les ofreció la oportunidad de desembarcar hoy en Barcelona y volver a Francia con los traslados previstos por las autoridades francesas – con destino final en Montpellier – o continuar con el barco hacia Génova, donde Costa Cruceros les proporcionará otra forma de volver, como al resto de los pasajeros.
Costa Cruceros agradece a las autoridades españolas, al Ministerio de Transporte italiano, a la Guardia Costera y a todas las autoridades locales involucradas, la colaboración constructiva iniciada en estos últimos días, para permitir esta escala . El Costa Deliziosa se encontraba realizando un crucero alrededor del mundo y tuvo que ser modificado por la alerta de pandemia emitida por la Organización Mundial de la Salud que llevó a las autoridades de los países originalmente planeados para el viaje, a aplicar restricciones para el desembarco de sus huéspedes. Por esta razón, desde el 14 de marzo, cuando estaba en Australia, el barco solo ha realizado paradas técnicas para operaciones de bunkering.