Royal Caribbean comunicó ayer a sus empleados que dada la actual crisis por la pandemia del coronavirus se ve obligada a despedir o suspender el empleo del 26% de su plantilla en EEUU, que asciende a más de 5.000 empleados. Igualmente, la mayoría de los contratos de la tripulación han concluido.
En una escueta declaración, la compañía lamentó este hecho: «Las circunstancias de la pandemia hicieron que esta acción fuera inevitable y duele separarse de tanta gente buena y talentosa.»
Al mismo tiempo, Larry Pimentel, Presidente y CEO de la marca upper-premium del grupo, Azamara, renunció a su puesto, por lo que Richard Fain, Presidende del Consejo y CEO del grupo Royal Caribbean Cruises Ltd, declaró: «Perdemos un gigante de los cruceros hoy. Un innovador para Azamara y la industria que creó el concepto de inmersión en destino. Larry es una de las mejores mentes y personas de la industria del turismo. Es un pensador original, un emprendedor y alguien cuyas opiniones ayudaron a mejorar no solo Azamara sino todo el grupo RCL en los pasados 11 años.»